Allá por el 2008 en un encuentro entre productores españoles y portugueses organizado en Lisboa, conocí al músico, director de cine, productor, guionista y, sobre todo ello, al ARTISTA —con mayúsculas— Filipe Melo. Por casualidad nos cruzamos en el pasillo y nos paramos hablar. Llevaba bajo el brazo una copia de su cortometraje “I’ll see you in my dreams” el primer film de zombis producido en Portugal y dirigido por Miguel Ángel Vivas (conocido ahora por “Secuestrados” o la eminente “Welcome to Harmony”). Justo hacia un par de semanas que yo había visto el corto en el programa Versión Española; me había encantado y así se lo transmití.
DVD de "I'll see you in my dreams" |
Filipe me contó que intentaba hacer una película de aventuras y fantasía titulada “As increiveis aventuras de Dog Mendonça e Pizzaboy” inspirado en las producciones de Hollywood de los 80 como “Los Cazafantasmas”, “Los Gremlins”, “Regreso al futuro” o “Golpe en la pequeña china”. Contaba como un repartidor de pizzas descubría por accidente un mundo mágico en las cloacas de Lisboa, oculto allí desde que los nazis huyeron de la derrota en la II Guerra Mundial a través de la capital lusa —algo que realmente pasó—. La particularidad del proyecto era que está vez los hombres lobo, los zombis y los investigadores de lo oculto se movían por Lisboa y hablaban portugués. Los misterios a los que se enfrentaban la pareja protagonista (Dog y Pizzaboy) se entremezclarían con la idiosincrasia de la historia y de la sociedad portuguesa actual. Esa era su gran originalidad.
Aquel mismo día me entregó una copia del guión. Veinte emails después y unas cuantas reuniones entre Galicia y Portugal, decidimos que intentaríamos unir fuerzas para llevar a cabo el proyecto. Pero no conseguimos los apoyos necesarios en nuestras respectivas industrias (la portuguesa y la gallega) para hacer la película que nos imaginábamos. La fantasía no parecía tener cabida en nuestro mercado, o eso decían los que decidían sobre ello, a pesar del éxito y la buena taquilla que “El Laberinto del Fauno” o “El orfanato” habían obtenido durante aquella época.
Yo me aparté del proyecto pero Filipe Melo no desistió. Una vez descartada la idea de producir una película, en lugar de enterrar el guión en un cajón, decidió adaptar la historia a un maravilloso comic que salió publicado en 2010. Resultó ser un éxito rotundo, con el prologo escrito por el mismísimo maestro del terror John Landis (creaciones suyas son “Un hombre lobo americano en Londres” o el videoclip de Michael Jackson “Thriller”). Incluso llegó a publicarse en EEUU de la mano de Dark House la editorial de Hellboy o Sin City y su libreto ganó numerosos premios.
Aquel mismo día me entregó una copia del guión. Veinte emails después y unas cuantas reuniones entre Galicia y Portugal, decidimos que intentaríamos unir fuerzas para llevar a cabo el proyecto. Pero no conseguimos los apoyos necesarios en nuestras respectivas industrias (la portuguesa y la gallega) para hacer la película que nos imaginábamos. La fantasía no parecía tener cabida en nuestro mercado, o eso decían los que decidían sobre ello, a pesar del éxito y la buena taquilla que “El Laberinto del Fauno” o “El orfanato” habían obtenido durante aquella época.
Yo me aparté del proyecto pero Filipe Melo no desistió. Una vez descartada la idea de producir una película, en lugar de enterrar el guión en un cajón, decidió adaptar la historia a un maravilloso comic que salió publicado en 2010. Resultó ser un éxito rotundo, con el prologo escrito por el mismísimo maestro del terror John Landis (creaciones suyas son “Un hombre lobo americano en Londres” o el videoclip de Michael Jackson “Thriller”). Incluso llegó a publicarse en EEUU de la mano de Dark House la editorial de Hellboy o Sin City y su libreto ganó numerosos premios.
Versión portuguesa de los comics |
En 2012 publicó su secuela “A extraordinarias aventuras de Dog Mendonça e Pizzaboy II: Apocalipse” con prefacio de George A. Romero (director de “La noche de los muertos vivientes” e inventor del concepto actual de zombi) Y este mismo año 2014 cerró la trilogía con “As Fantasticas Aventuras de Dog Mendonça y Pizzaboy III: Requiem” con la introducción escrita está vez por el director de “La matanza de Texas” Tobe Hopper.
En estos momentos también se está desarrollado un videojuego, muy al estilo cross-media que ahora te demanda todo proyecto audiovisual "As Interativas Aventuras de Dog Mendonça & Pizzaboy". Si alguien quiere apoyarlos a través de crowdfunding sigue este enlace: AQUÍ
En definitiva el éxito de aquel guión y la saga que le continúo ha sido espectacular.
A mí personalmente el álbum que más me gusta es el que cierra las aventuras de estos enigmáticos personajes. Se nota que en el proceso Filipe y su esquipo han perfeccionado el arte de contar sus historia a través de viñetas. El primer tomo era deudor de lo que habría sido el largometraje, el segundo mejoraba, pero el tercero es GENIAL. Su crítica a estos tiempos de crisis económica a nivel mundial —tomando como ejemplo la que sufre Portugal—, quedan elegantemente reflejada usando como medio: monstruos, doctores locos y seres sobrenaturales. Y, es en mi opinión, más incisiva que algún cine mal llamado social (no me malinterpretéis no me refiero ni a las obras maestras de Costa-Gavras, ni a las películas de León de Aranoa ni a las de Ken Loach, etc.)
Filipe Melo y yo hemos seguimos en contacto todos estos años. Él fue quién me presentó a Miguel Cordeiro (que junto a Marc Timón) compuso la banda sonora de mi película El pequeño mago. Juan Cavia, el ilustrador del comic, ha diseñado los zombis y algunos escenarios de La Granja los malditos, mi siguiente producción.
Durante estos años, la industria cinematográfica ha cambiado, y mucho. Ahora hay cabida para el género fantástico que hablen portugués e incluso gallego. Ahí está la simpática “Los lobos de Arga” producida por Vacas films y protagonizada por Manuel Manquiña, Luis Zahera o Mabel Rivera.
Quizá era el momento indicado de plantearse otra vez realizar una película sobre este argumento. Nunca digas nunca jamás, pero hace unos meses Filipe me confesaba mediante una conversación telefónica que se mostraba satisfecho con el trabajo realizado y que Dog Mendonça y Pizzaboy ya habían cumplido sus expectativas con creces. Era el momento de avanzar hacia otros proyectos.
Pero ¿qué hubiera sido de Dog Mendonça y Pizzaboy de carne y hueso ocupando la gran pantalla? Parece que no lo sabremos nunca.