viernes, 12 de febrero de 2016

¡Rompe Ralph! - Crítica Cinematográfica

Disney cambia, pero no mucho

DIRECTOR: Rich Moore
GUIONISTA: Phil Johnston y Jennifer Lee
AÑO DE PRODUCCIÓN: 2012
 
 

El director de animación Rich Moore tiene el mérito de haber dirigido un puñado de los más divertidos episodios de Los Simpson y de Futurama. Pero también se merece ser laureado por haber conseguido transmitir parte de esa irreverencia, inherente a las mencionadas series de televisión, al mundo de los clásicos de Disney.

¡Rompe Ralph! es una película poco común en la filmografía del estudio, igual que antes lo fueran Taron y el caldero mágico o Lilo y Stich. Las aventuras del villano de un anticuado videojuego, que se ha cansado de representar siempre el mismo papel; aunque no sea, quizá, muy originales, su representación en la pantalla y su humor se salen del estándar al que parecía constreñido el departamento artístico de la productora.

La historia puede tener similitudes con Toy Story la primera película de Pixar. Ésta, ahora, convertida en una empresa prima-hermana del colosal conglomerado Disney. Si allí los juguetes tomaban vida cuando los niños abandonaban la habitación, aquí son los personajes de videojuegos que continúan con su cotidianidad en cuanto los humanos cierran el salón de juegos. Es en ese momento cuando la película te atrapa. Los gráficos 8-bits de las primeras consolas se mezclan con el mundo de ambientación hiperrealista de la guerra del más moderno de los shooters y con el rosa chicle de las carreras Kawaii.
 
 
 
¡Y consigue lo imposible!. ¡Rompe Ralph! logra empatizar con los padres y los más pequeños de la casa. Pero no sólo por la historia, que a eso nos tiene muy acostumbrado el cine de animación actual. Si no en la mezcla de dos mundos: el arcaico movimiento limitado de las recreaciones de los años ochenta, y la pomposidad digital de las consolas actuales. Consiguiendo resumir en algún plano treinta años de historia de los juegos electrónicos.
 
 

Curiosidades:

La banda sonora está compuesta por Henry Jackman, músico inglés, que ya ha trabajado para películas de animación, como Monstruos contra Alienígenas, Winnie the Pooh o El gato con botas. También incluye temas electrónicos de Rihanna, de Skrillex y de la estrafalaria banda japonesa AKB48, que ostenta el honor de haber sido incluido en el Reccord Guinnes por ser el grupo con más integrantes del mundo.